De mis añejas acciones
Con sus errores y aciertos
Son  los rumbos más perfectos
Que hoy me otorgan proyecciones.
Mis antiguas ilusiones
Hoy dan fruto esplendoroso
Y mi  trino  generoso
luce  inspirado torrente,
Que me elevo libremente
EN EL ORBE MAJESTUOSO.

II

Nada fue color de rosa
Hubo risas y dolor
Más con nítido furor
mi estancia tornase hermosa.
En una senda preciosa
Me sentía muy estable
Y con  carácter amable
Siempre anduve positivo,
Que no tengo ni un motivo
¡DEL QUE ME SIENTA CULPABLE!

V

Si fue equivocada ruta
Fortaleció mi experiencia
Y por sólida conciencia
Mi confianza es absoluta.
Más con fuerza resoluta
Y con  un sentido estable
Lo combate al inefable
Por su escaso fundamento,
Y no hay el resentimiento
DE MI AYER INCOMPRABLE.

III

Bebí el néctar deleitante
En los labios de mujer
Y la entraña del placer
Me dio un  norte fascinante.
El planeta impresionante
Me llevó a la creación
Y prosigo en la misión
Por tan divino regalo,
Y si en  un tiempo fue ralo
HOY LE ENCUENTRO  LA RAZÓN.

VI

Hubo ratos de alegría
Y tristeza por doquier
Más instantes de placer
Me entregaron su ambrosía.
Nunca fui la flor de un día
Por defecto presuroso
Pero nunca jactancioso
Ni acusé de incompetencia,
Que en mi pasada existencia
NO HAY ESPACIO TORMENTOSO.

En brazos de la inocencia
Y entre el latido del mundo
forjé mi afecto profundo
y feraz condescendencia.
Por lucir celeste herencia
Surge mi verso inmortal
Y por su esencia especial
da muy grato amanecer,
Que si volviera a nacer
¡QUISIERA UNA VIDA IGUAL!