El que dice ser muy probo
Y nunca lo es verdad
Es cordero en realidad
Bien disfrazado de lobo.
A veces pasa de bobo
Por su vil desfachatez
Pero esconde su sandez
En su entraña tan impura,
Y no lo es con altura
SI SE DENOTA  HONRADEZ.

II

A la palabra envilece
Por carecer de cimiento
Que ni siquiera al talento
De alguna forma engrandece.
Su insulsa fama decrece
Por su nimia lealtad
Y al quedar en la orfandad
De inmediato pierde el paso,
Y lo conmina al fracaso
¡POR SU NULA IDENTIDAD!

V

Ante el pecado hay cretinos
Que se persignan mil veces
Más no trabajan con creces
pues delinquen sin más tinos.
Ensombrecen sus caminos
Junto a su ecuanimidad
Y le aflora  mezquindad
cerca de cruel felonía
Y hay quien  sigue en su falsía
AUN  NO SIENDO LA VERDAD.

III

No se le tiene confianza
Por su prédica increíble
Que ni haciendo lo imposible
Deja nítida enseñanza.
La noche se le abalanza
Y se opaca su esplendor
pero al  no ser  lo mejor
Del delito sólo es vía,
Y al ocultar su falsía
¡A LA MENTIRA HACE HONOR!

VI

Lo que ser jamás podría
defiende sin más sentido
y camina coludido
con el negativo guía.
Al ser de ruta vacía
Se opaca su brillantez
Y por falsa calidez
La diestra saca del plato,
Y es que ser un mentecato
ES TREMENDA INSENSATEZ.

El engaño siempre se usa
Pero a él mismo ni llorando
Y se iría sentenciando
Porque el pecado lo acusa.
Es que si de todo abusa
Al mañana pone llave
Y al  no haber ya quien lo alabe
Irá directo a  la lona,
pues lo real de la persona
¡TARDE O TEMPRANO SE SABE!