Irradia tu cabellera
Una penumbra de encanto
Y a tu faz sin un quebranto
Le da un son de primavera.
Renace mi dicha entera
Y las ansias de tenerte
El de abrazarte muy fuerte
En pos de un norte prolijo,
Y en tu aureola me cobijo
POR SER LUZ QUE TU ALMA VIERTE.

                               II

Al caminar sin sentido
Más al darme luz debida
 por aferrarme a la vida
Un milagro es lo ocurrido.
Hoy mi rumbo es conocido
Donde ya nada es inerte
Y anhelo no más quererte
Sin que exista el desengaño,
Y todos los días del año
COMO EL MAR QUISIERA VERTE.

De una antorcha tienes brillo
De las flores su tersura
Y denotas la ternura
De tu carácter sencillo.
Te mereces un castillo
Y denotes tu candor
Y en romántico fervor
Tu mirada al cielo alumbre,
E irradie su  fina lumbre
DE INFINITO RESPLANDOR.

Así del todo sonriente
Me muero por contemplarte
Y en mis brazos estrecharte
Uniendo tu cuerpo y mente.
Eres un sol reluciente
De imagen multicolor
obra de arte con honor
y sentimiento fecundo
Y así marchas por el mundo
DESLUMBRANDO DE ESPLENDOR.