El mismo suelo en que nace
Es la morada especial
Si la quiere como tal
En todo le satisface.
Le da lo que más le place
Y lo llena de alegría
Si la adora noche y día
Por ser la más santa noria,
Y sin tanta vanagloria
LOGRA EL HOMBRE REAL VALÍA.

II

Si avanza sin hacer daño
Consagra su vocación
Y sirve  de corazón
Y consigue buen escaño.
A nadie parezca extraño
Pues merece por leal
Y por su estela formal
Consigue su noble altura,
Y le da la senda pura
¡LA MÚSICA ESPIRITUAL!

V

Tener espacio suntuoso
Para el ser no es necesario
Si tan sólo es solidario
Logra un peso majestuoso.
Se torna maravilloso
Si consuma un ideal
Y con aura intelectual
Adquiere feraz sapiencia,
Y conlleva una existencia
EN SU ESPACIO NATURAL.

III

Si está bien con el divino
Y cumple sus mandamientos
No lo agobian desalientos
Y genera buen camino.
Se aleja del desatino
Con aureolas divinales
Y sin las rutas casuales
Un nuevo norte apertura,
Y es que en  la misma natura
HAY LA CURA DE SUS MALES.

VI

Si es consciente de sí mismo
Y trasmite lo que sabe
Es la más perfecta clave
Para irradiar optimismo.
Si deja el antagonismo
Y denota su valía
Sin una ruta vacía
Emana jornadas bellas,
Y  trasciende a las estrellas
AL DAR RUTA A LA AMBROSÍA.

Si es consciente de su rol
Diseñará su futuro
Y sin llegar al apuro
Sigue la ruta del sol.
Le da espacio a su arrebol
Y a su bondad encamina
Y su triunfo determina
Por su fiel desprendimiento,
Al hacer de su alimento
¡QUE SEA SU MEDICINA!